Sois algunos, no muchos ya que aun no tengo tantos “followers”
como nuestro querido amigo “el pegatinas”, los que estáis esperando las
crónicas de mis últimas carreras del año, esperando la crónica de un Campeonato
de Catalunya de ciclo-orientación donde había puesto muchísima ilusión por ser
la única BTT-O de Catalunya en 2013, así como de una final de Copa Catalana de
raids en el Montsant donde se tenía que decidir el podio final de la Copa y
salíamos con opciones. Lamentablemente tengo que deciros que otra vez será, no
habrá crónicas…
No las habrá por una decisión que tomé hace un par de
semanas, después de la final de mi queridísimo Campeonato Aventura X-Perience
2013, y en el que seguí estos consejos que tan habitualmente leemos en las palabras
de los sabios, de los que saben sobre deporte y que no se cansan de repetir “escucha
a tu cuerpo”.
Los que me conocéis bien sabéis que después de mi gran
aventura del 2012, el Campeonato del Mundo de raids en Francia, me costó
alrededor de 1 mes y medio poder recuperarme, diría que al 100%, un mes de
trastorno del sueño, diarreas y dolores de cabeza en el que sufrí bastante, más
por estar viviendo una sensación nueva y extraña, que por los trastornos. Pues
como sabéis este año con el equipo hemos estado al 100%, hemos peleado a tope
todas las carreras de la Copa Catalana, y nos hemos enfrentado a todo un
Aveyron (Campeonato de Europa) y un Bimbache (Copa del Mundo) que pasan
factura.
Parecía que las sensaciones después de estas dos grandes
eran buenas, que mi cuerpo estaba preparado para soportar esto y mucho más, ya
que físicamente no sufrí secuelas en forma de lesiones, y los trastornos que
había vivido el año anterior los superé en 4-5 días. Per al ir avanzando los
meses he visto que este año me ha vaciado mentalmente. Estas últimas semanas me
estaba costando mucho salir a entrenar con ganas, lo hacía ya como rutina, pero
no difrutaba. Las últimas carreras salí a correrlas por mantener mi palabra con
todo el equipo, pero sin vivirlas como deben ser vividas. Todo esto se me ha
juntado con muchos viajes en mi trabajo de verdad (el que me da de comer y para
vivir), y también con un catarro de la intensidad de un elefante.
La conclusión me costó encontrarla, pero nada más tomarla
supe que había acertado. ¿Cuál es la frase que más repito yo en estas
conversaciones que tan a menudo tengo con mis amigos que montan en bici o salen
a correr? El deporte es para disfrutarlo, y esto precisamente es lo que yo no
estaba haciendo ahora.
En mi plan de entrenamiento cada año tengo un descanso de 45
días para recuperar el cuerpo, y este año no va a ser la excepción. Con estas
palabras no quiero decir que ya pase de todo para siempre, simplemente voy a
avanzar mi descanso unas 2 semanas y después, estoy más que seguro que volveré
a entrenar con más ganas que nunca, ¿Por qué? Porque he escuchado a mi cuerpo y
me pide un paréntesis. Un descanso para motivar la mente de nuevo, este motor
tan importante que en los raids nos da gasolina para unas horas más; un
descanso para renovar las articulaciones tan desgastadas durante el año con las
dosis de un buen colágeno natural, y un descanso para cambiar de una vez por
todas el color negro de las dos uñas que llevo arrastrando desde el Bimbache y
verlas de nuevo con un blanco inmaculado y con ganas de volver a calzarse unas
zapatillas.
NOS VEMOS EN DICIEMBRE CON LOS NUEVOS RETOS!!
NOS VEMOS EN DICIEMBRE CON LOS NUEVOS RETOS!!